Paloma Santacruz es una diseñadora industrial y talentosa del macramé quien, junto a su esposo, Ricardo Durán, un destacado arquitecto, han creado Atelier, una marca mexicana de diseño textil dedicada a la elaboración de piezas únicas y artesanales en Cancun, Quintana Roo. Paloma estudió diseño industrial y aporta su visión contemporánea a la técnica del macramé. Sus piezas se elaboran con tejidos actualizados, colores y diseños contemporáneos y logra modelos auténticos, únicos y naturales, sin perder la esencia de la técnica.
“Soy una persona hábil con mis manos, anteriormente tenía un negocio de decoración, todo lo hacia yo, todo salía de mi mente a mis manos, además me encanta viajar y soy muy curiosa. Siempre busco que aprender, así que al llegar a Cancún quise experimentar algo nuevo y me encontré con esta técnica de diseño textil llamada macramé, que me encanta y ahora desarrollo”, comenta Paloma Santacruz.
Cada pieza de Atelier se trabaja individual y manualmente por Paloma y su equipo: se teje el macramé, amarra y ensambla de manera artesanal obteniendo resultandos hermosos y únicos. Los patrones asimétricos enroscados y anudados de manera experta establecidos por la diseñadora hacen eco del hermoso paisaje que rodea el área y, al mismo tiempo, brindan una especie de protección natural.
En algunos de sus tapices combina el encaje con otros tejidos y cada una de sus colecciones están inspiradas en algo diferente, algunas de las cuales están realizadas en colaboración con artesanos locales. Gran parte de la inspiración creativa de Paloma proviene de forma ecléctica, como también de la naturaleza y de su origen cultural.
Además de estas enormes e interesantes obras de arte de fibra, Paloma también crea piezas que son un poco más reducidas y adecuadas para decorar el hogar acertadamente, agregando un valor importante a cada estancia que las posee. El tamaño no importa en sus creaciones, porque la diseñadora demuestra una gran destreza para componer piezas repletas de color al combinar hilos naturales teñidos, variando nudos, giros y ataduras.
“Nosotros siempre decimos que lo que hacemos son piezas particulares, independientemente de lo que a ti te haya gustado, yo lo respeto porque igual quieres ese producto, pero mis clientes siempre me dan la libertad de cambiar un poco, darle un giro a la pieza, siempre dándole un toque distinto para que cada persona se lleve una obra completamente única y exclusiva” agrega Paloma.
Sus modelos han sido utilizados en la decoración de escaparates, restaurantes, viviendas, hoteles, etc… Y en cada una de sus piezas existe algo que exuda una cualidad que no se puede expresar con palabras: son funcionales, hermosas, con los pies en la tierra, pero increíblemente complejas y, sobre todo, exclusivas.
Si bien el macramé puede ser realmente simple, también se puede llevar a otro nivel, a gran escala y sublime. Al igual que la artista de macramé Paloma Santacruz lo ha hecho con todos y cada uno de los modelos y colecciones de Atelier. Todo demuestra que el arte del macramé es algo bastante impresionante e intrincado, con materiales simples y aparentemente técnicas sencillas, que en última instancia pueden convertirse en una gran obra maestra.
Por Fernanda Gordillo Estrada
Fotos Cortesía Natalia Paloma Santacruz Romero / Ricardo Durán Canto