Artículos como platos, jarras con o sin asas, macetas, floreros, pilas de agua, imágenes religiosas, dejan de ser elementos comunes cuando se elaboran con cerámica de Talavera, tradición alfarera que se originó en España y después llegó a México ganando su propia identidad. Junto al más humilde de sus objetos, los hornos de los alfares del taller de Talavera de la Reyna han cocido piezas de la más depurada técnica. Con la participación de más de 80 artistas contemporáneos, es considerada la colección más importante de América Latina.
Talavera de la Reyna es un taller vanguardista y con una gran particularidad, además de salvaguardar y preservar una de las artesanías mas importante del país, busca reforzar y revolucionar cada pieza utilizando técnicas y patrones originales del siglo XVI. Con la colaboración, aportación y cooperación de artesanos y diseñadores contemporáneos, este taller transporta esta interesante y única técnica a un lenguaje artístico, estético y decorativo, mientras que su apasionada fundadora e iniciadora Angélica Moreno tiene desde el principio un objetivo central y único por realizar la mejor Talavera de todo el estado de Puebla.
La cerámica ha conjugado la utilidad y la belleza de los pequeños y grandes elementos que el hombre emplea en su vida cotidiana. Se trata de un arte práctico que desarrolla su belleza justamente en su utilidad. Y, como muestra de ello, tenemos a Talavera de la Reyna. En este magnifico y exclusivo taller cada pieza se diferencia de las demás por su diseño, saturando el espacio en blanco de la loza con escenas y motivos monocromos, o la mezcla de los colores naranja, verde, negro, amarillo y azul fino, transformando lo clásico a una innovación artística, elaboradas a mano en el torno y con la técnica centenaria del vidriado cada pieza es maravillosa.
El proceso de elaboración no ha cambiado del todo completamente, los motivos, las formas y el hermoso decorado se han ido enriquecido y renovando con el paso del tiempo. No obstante, en la actualidad surge nuevamente el interés por dar reconocimiento de autenticidad a los procesos de fabricación y reconocer las zonas donde se extraen las materias primas para su elaboración.
Talavera de la Reyna cuanta con un museo, donde se muestran exposiciones, las cuales ha permitido al taller erigirse como una de las firmas más alabadas, al colaborar con más de 50 artistas nacionales e internacionales, para experimentar con materiales, texturas y colores tradicionales. El resultado es más de 300 obras de arte de Talavera de la Reyna de su colección. La combinación de tradición e innovación nunca es una tarea sencilla. En este caso, los artesanos aportaron sus conocimientos y larga experiencia como herederos de la artesanía tradicional, mientras que los artistas proporcionan su intelecto y peculiaridad inventiva. Esta combinación es extraordinaria, produciendo magníficas obras nuevas que rompen la tradición, pero al mismo tiempo la rescatan obteniendo como distintivo el acabado vítreo en color blanco marfileño como base de la decoración.
La tradición de la Talavera poblana es una técnica multicultural que reúne los éxitos adquiridos por diferentes civilizaciones y culturas a lo largo de la historia, y que los alfareros y artistas de Talavera de la Reyna han sabido elaborar y desarrollar durante décadas gracias a su gran habilidad como artesanos.
De esta manera, la Talavera mexicana ha adquirido alma propia, teniendo una importante denominación de origen, este evento cultural juega un papel protagónico en la vida artística de nuestro México; su presencia habita los templos sagrados del catolicismo Novo hispánico embellece los platos típicos y adorna los hogares.
La Talavera es sagrada como cotidiana; en ella se encuentran dos expresiones artísticas muy detonantes: la de México y la de toda la humanidad. Por lo tanto, Talavera de la Reyna es uno de los sitios centrales e importantes donde se piensan, crean y adquieren estas maravillosas reliquias artesanales.
Por Fernanda Gordillo Estrada
Fotos de Gustavo Pérez y Jon Labastida