La cocina casera se combina con el arte en este libro de cocina único en su tipo que utiliza alimentos para crear reinterpretaciones comestibles de esculturas, pinturas, arquitec- tura y diseños modernos y contemporáneos.
Esther Choi, artista, historiadora de arquitectura y cocinera autodidacta, se inspiró en un elaborado menú diseñado para Walter Gropius en 1937. Con una espectacular fotografía, estas 60 recetas evocan a artistas o arquitectos famosos y las obras por las que son conocidos: una Quiche Haring con la ensalada Frida Kale-o, o la Robert Rauschenburger seguida de Flan Flavin. Es sorprendentemente hermoso y provocativo, ya que desdibuja los límites entre el arte y la vida cotidiana y celebra la comida de una manera atractiva e imaginativa. prestelpublishing.randomhouse.de
Redacción Design Hunter