La firma alemana de alta relojería fundada en 1845 es en la actualidad un referente de buen diseño, elegancia e innovación en maquinaría que marca pasos firmes en su legado y seduce a fieles seguidores de los clásicos reinventados y a nuevas generaciones amantes del lujo.
En el recién celebrado, en octubre del presente año, Concorso d´Eleganza Villa d´Este, fundado en 1929, y con el paradisíaco escenario de Lago Como en la Región de Lombardia en Italia, fue el punto de encuentro por excelencia de un exclusivo desfile de autos clásicos que engalanaron la estupenda celebración con su estética única aunada con la singular muestra de pasión de cada participante.
“El premio expresa nuestro entusiasmo por el automóvil clásico como obra de arte y nuestro respeto por su propietario, que trabaja arduamente para preservar un bien cultural restaurándolo y cuidándolo”, comentó Wilhelm Schmid, CEO A. Lange Söhne.
Por primera ocasión el ganador de “Best of show”, Brian Ross, propietario de un majestuoso Ferrari 250 GT Tour de France del año 1956 fue quien recibió el maravilloso regalo de una obra maestra de la casa alemana, el 1815 Chronograph de A. Lange & Söhne, una pieza realizada especialmente para la ocasión y presentado personalmente por Wilhelm Schmid, CEO de A. Lange Söhne.
“Los automóviles representan la libertad y la independencia; los relojes simbolizan el valor del tiempo. Por eso nos fascinan por igual. Al elegir el CRONÓGRAFO 1815 como el nuevo reloj del ganador, también nos guiamos por el vínculo histórico entre el deporte del motor y el cronometraje”, Wilhelm Schmid, CEO A. Lange Söhne.