“Siempre supe que me dedicaría a crear arquitectura. Después de formarme como arquitecto comencé a trabajar en un despacho que se especializaba en casas mexicanas contemporáneas. El despacho estaba cerca de mi casa, me asomé pues eran los tiempos en los que se podrían ver las oficinas desde la calle, me permitieron conocer su trabajo y posteriormente me dieron la oportunidad de trabajar en el despacho; desde pasar lista en la construcción, hasta ayudar a dibujar los planos. Después de ese momento no he parado de proyectar casas”, nos cuenta el arquitecto Jorge Conde, quien se ha desarrollado una carrera en el diseño y construcción de residencias de alta gama.
Su estilo es mexicano contemporáneo. Pero ¿qué es mexicano contemporáneo? Es el uso de los materiales de la región en una arquitectura potente, de grandes dimensiones, que se integra al entorno y que busca el mayor aprovechamiento de la iluminación natural, mármol, piedra y madera son los materiales perfectos para lograr una residencia en la cual sus moradores puedan llevar una vida cómoda y dinámica, que responda a su estilo de vida y que en gran medida les proporcione los espacios adecuados para desarrollarse.
Desde luego que se trata de una propuesta fuerte y atemporal, que pueda envejecer con dignidad. Cuando una familia mexicana se hace una casa es pensando en la máxima calidad, es un esfuerzo patrimonial que se hace para que perdure entre generaciones. Así proyecta el arquitecto Jorge Conde.
“Mi especialidad es la arquitectura residencial de alta gama. Cuando quieres hacer algo novedoso, sobresaliente, desafortunadamente se requiere de inversiones importantes, entonces la arquitectura de alta gama ya sea una casa, oficina, museos, lo que sea, si se quiere que sea de calidad requiere de un proyecto ambicioso en espacio, iluminación y diseño.
Ahí es donde tengo la experiencia para crear hogares individuales”, nos cuenta Jorge Conde.
En Monterrey la escala de los terrenos que se consiguen normalmente es de una a dos veces más de lo que se maneja en Ciudad de México y eso permite tener mejores espacios y diseños de landscape, este proyecto tiene una pendiente importante, un terreno muy inclinado con poca vegetación, con una panorámica muy importante hacia la ciudad y hacia la montaña.
Así que, siguiendo las condiciones del terreno, el arquitecto jalo la casa a la ciudad y generó un bosque. Se sembraron arboles con alturas de hasta 25 metros con troncos de 50 centímetros de diámetro y así se consiguió una casa de cuidad que se percibe como si estuviera en medio del bosque. La parte trasera de la casa ve hacia el bosque Chipinque con la gran sierra de San Pedro, y en la entrada de la casa, orientada hacia la ciudad es donde se plantaron los encinos con la intención de traer el ambiente de Chipinque y proyectarlo a la ciudad.
“A diferencia de Estados Unidos, en México para la construcción utilizamos materiales sólidos como concreto, acero, blocks de cemento o tabique, y eso le da una solidez a la casa con diferencia a las de Estados Unidos, allá tocas los muros y se sienten huecos, como de cartón, es como yo digo.
Esta casa en especial tiene mucho de lo que hago como arquitecto que es usar puros materiales naturales, se usa mucha piedra, mármol, madera hasta decir basta, la estructura por las proporciones de la casa tuvo que ser de acero, las alturas y los espacios son muy generosos, y en esta búsqueda de la integración del interior con el exterior manejamos una cantidad enorme de cristales, de gran formato, la gran mayoría se mueve para cuando hay buen clima tener todo abierto y, cuando no hay tan buen clima permanece cerrado; desde luego que la casa cuenta con clima artificial.
Los espacios se van proyectando, respondiendo a las necesidades y el programa que el cliente requiere, así que en el despacho respondemos propiciando proporciones estéticas, en espacios que generamos con la intención de integrar exterior con interior. Por ello vemos en esta casa una gran sala con jardín y terraza, una recamara en franca armonía con el bosque. Y vistas hacia el verde del entrono en casi cualquier espacio de la residencia.
En esta casa, en especial, la llevamos al límite con materiales muy sólidos y contundentes como la piedra, el mármol, la madera y con la gran transparencia que nos permiten los cristales de gran formato”, nos cuenta el arquitecto Jorge Conde.
“En este caso específicamente después de presentar el concepto se trabajó de la mano del cliente, y así participó en cada etapa del diseño. Al terminar la casa, antes de recibir los muebles fuimos a ver el resultado y al cliente le encanto, se rebasó la expectativa, terminamos con un cliente muy satisfecho que no dejo de dar las gracias y decir que es una casa contemporánea, cómoda y que está muy feliz”, concluye el arquitecto Jorge Conde.
“Yo hago arquitectura mexicana contemporánea. Los acabados rústicos le dan algo especial a mi arquitectura. En el norte del país los clientes gustan de combinar un estilo contemporáneo y rústico”, Jorge Conde.
Arquitectura y diseño interior de Jorge Conde
Por David Solís
Fotos de Héctor Velasco Facio