La obra de Priscila Hernández se caracteriza por su uso muy particular del acero, la piedra y la madera; y muy en especial por sus juegos de iluminación que transforman sus residencias al llegar la noche.

Hablanos un poco de ti y de tu trayectoria en el mundo de la Arquitectura.

“Desde muy niña supe que quería ser arquitecta, porque en los viajes que hacía con mis papás me llamaban mucho la atención los hoteles que visitábamos y cómo me hacían sentir especial. Recuerdo que le preguntaba a mi papá quién hacia esos lugares y cuando me decía que eran señores llamados arquitectos, me sentía fascinada. Yo soy originaria de Torreón, Coahuila y aquí no existía la carrera de Arquitectura, así es que estudié en el Tec de Monterrey y posteriormente en la Universidad Autónoma de Coahuila, por lo que tengo un análisis de diseño muy profundo gracias al Tec y en Saltillo tuve una formación de multi ingeniería y aprendí a construir. A mi regreso a Torreón, empecé a armar mi despacho desde cero, hasta el 2004 que nació PH Proyectos”.

¿Cómo ha sido combinar tu carrera con la vida personal?

“Ha sido todo un reto porque nunca he dejado de trabajar y soy mamá de mis tres hijos al cien por ciento en las tardes, pero siempre he tenido el apoyo de mi familia; y también ha ayudado que me gusta mucho la ingeniería y la construcción y que nada me da miedo. Quizás porque crecí entre tabiques, terrenos, puentes y construcciones, pues mi papá es ingeniero civil, pero para mi es muy normal el trato con el personal de obra, y eso ha hecho que mi carrera no se detenga”.

¿Cómo defines tu estilo?

“Aquí en Torreón el clima es muy drástico, tenemos un calor insoportable, una tierra única y peculiar. Casi no llueve, pero cuando ocurre es un caos porque no estamos preparados; entonces siempre estamos buscando materiales naturales que no generen tanto mantenimiento, que puedan disimular, absorber, aguantar las características del sol y la tierra, y por eso yo uso tanta piedra. Podría decir que mi estilo es evolutivo. Va saliendo natural mientras voy buscando nuevas sensaciones que proyecten la personalidad de mi cliente y cumplan sus necesidades. El tiempo que tengo para analizar a mi cliente y los cuestionarios que llenan con imágenes, textos y deseos de lo que quieren en su casa me ayudan a saber lo que voy a plasmar en el proyecto, pues su historia y el momento de vida en el que están son únicos”.

¿Qué arquitectos te inspiran?

“Me encanta Zaha Hadid. Lo que hizo fue romper patrones a nivel mundial y creer en ella misma. No me puedo imaginar con todos los tropiezos que se encontró como mujer, pero siempre fue firme y segura de que haría una revolución en el diseño”.

¿Ha sido difícil el camino para obtener un nombre reconocido como arquitecta?

“Claro, por supuesto. Yo creo que me ayuda mucho mi personalidad fuerte porque les digo a los albañiles, plomeros y electricistas que para mi todos son unas grandes personas y unos caballeros, hasta que me demuestren lo contrario. Siempre los trato de una manera muy cordial y educada, como si fuera mis clientes, y eso hace que se sientan motivados e integrados. Hoy por fin después de 15 años tengo un equipo muy sólido, tenemos un mismo lenguaje y en mis obras no existe ninguna falta de respeto ni mala palabra. Pero eso sí, llego yo y se apaga la música porque es momento de indicaciones. Llegar a eso, siendo mujer, me costó muchísimo pues antes no había ni arquitectas ni diseñadoras. Por eso estoy tan contenta de lo que he logrado”.

¿Con qué interioristas trabajas?

“Aquí en Torreón hay despachos de interiorismo que van creciendo poco a poco, son jóvenes y me gusta probar materiales y proveedores que tengan algo fresco. Soy de la idea de crecer de manera radial para hacer fuertes a los que están cerca y así es como he trabajado. Me proponen una idea, la presentamos al cliente y vamos de la mano”.

¿Qué materiales te representan?

“Las diferentes variedades de piedra que son un fuerte elemento en mis proyectos, el acero que puede ser tan rígido y estructural o tan ligero y flexible como tú lo queras plasmar, y las maderas. También el agua que siempre está presente en mi arquitectura”.

¿Qué rasgos representan tu estilo?

“La iluminación en mi arquitectura es muy especial. Muchos arquitectos manejamos piedras, alturas, materiales similares, pero el manejo de la luz es algo que me apasiona y mis casas de día son unas y de noche se transforman y producen otras sensaciones”.

¿Cuál sería tu proyecto ideal?

“Un hotel y estaría genial que fuera boutique porque se presta a más detallitos. Llegará en su momento y mientras seguiré diseñando para proyectos residenciales, industriales y comerciales”.

¿Hay alguna obra que te maraville y puedas admirar por horas?

“Yo aprendo mucho de ver. No puedo decir una obra en específico, porque en todas encuentro algo positivo. Pero algo que me encanta son los museos, pues al diseñador se le da la libertad total de plasmar una arquitectura muy genuina y son de los elementos arquitectónicos que más me nutren pues además me encanta el arte”.

¿Cuál es tu postura sobre sostenibilidad en el diseño y la arquitectura?

“Deberíamos ser más conscientes del uso de materiales que sumen y no que resten al planeta. Por ejemplo, Torreón se ubica en un área desértica y nos cuesta aceptar que aquí no crecen las palmas ni los jardines como en el sur o en el centro del país, pero que podemos tener un paisajismo extraordinario que use menos agua, que no dañe, que apoye el entorno y que sea ecológico con materiales utilizados en la obra y en el landscape”.

¿Cómo influyen los cambios sociales en la arquitectura y el diseño?

“Totalmente y es un cambio que se está notando muy claramente. Incluso yo estoy empezando a hacer edificios verticales y mira que en Torreón estábamos acostumbrados a comprar nuestro terreno, construir nuestra casa y tener un jardín; pero hoy la gente necesita espacios dignos, cómodos y lindos mucho más accesibles. Aquí en corto la pandemia ha despertado y roto muchos miedos y barreras sociales y hay mucha demanda de departamentos”.

¿Un proyecto debe ser atemporal y funcional siempre?

“Funcional totalmente, pero incluso eso es relativo porque quizás lo que me funciona hoy a los cuarenta, hace diez años no lo era y en diez años tampoco lo será. Por eso el diseño debe adaptarse a los cambios que van sucediendo en la vida de las personas. La arquitectura puede ser funcional, neutral y flexible para que los acentos decorativos vayan encaminados de acuerdo a las tendencias y la época que vive el cliente”.

¿Qué sigue en tu carrera?

“Tengo dos marcas paralelas a mi despacho y quiero fortalecerlas. PH Home es una tienda en línea de productos de casa y decoración con mucho diseño y calidad. Es una selección muy cuidada de telas, vajillas, colchas, lámparas, hamacas, todo lo que a mi me gusta o voy descubriendo y que vale la pena tener en casa pues dan felicidad y bienestar. Y Laguna Heats que son equipos para calentar terrazas y chimeneas de leña que yo fabrico. Son proyectos que me ilusionan mucho y que van de la mano con mi trabajo de arquitectura”.

Por Norma Rodríguez

Fotografías de Aldo C Gracia.